miércoles, 16 de diciembre de 2009

Elecciones por la independencia.

No quería hablar de semejante tontería, pero al final no me ha quedado más remedio que hacerlo.
El motivo es el denominado "gran exito" de las votaciones por la independencia de Cataluñia, especialmente por el periodicucho "Avui".
Para empezar, hay que analizar muchas cosas sobre esto. En primer lugar hay que decir que la participación no llegó al 30 %. Dentro de este "gran porcentaje", aproximadamente el 90% votó a favor de la independencia. O lo que es lo mismo, aproximadamente el 75 % de los habitantes de los pueblos que votaron, no desean la independencia. Porque no hace falta ser muy inteligente para saber que los únicos que votaron fueron los interesados en la propuesta y alguna que otra persona con dos dedos de frente (el 10% que votó que no) que se inmiscuyó en esta ridícula pantomima.
Si continuamos con el análisis, es significativo que se permitiera votar a "adultos" de 16 años y extranjeros (se deduce que tienen un gran espíritu nacional catalán). A simple vista podría parecer hasta bueno, pero si nos fijamos bien... Como ya he repetido hasta la saciedad en este blog, la manipulación histórica e informativa en Cataluñia es atroz y conforme más tiempo pasa desde su "libertad de cátedra", más trasgiversaciones y engaños se producen o estudia los alumnos, por lo que contra más nueva es una generación, más controlada está por el gobierno catalán; y creo no equivocarme mucho al decir que por aquí van los tiros a la hora de tolerar el voto pueril. Algo parecido pasa con los extranjeros, uno sumiso a las imposiciones gubernativas catalanas, tiene más posibilidades de conseguir trabajo, ayudas y demás, y si, el voto será secreto (si es qué lo es), pero enlazando con lo primero reseñado... lo lógico es que sólo votaran quienes estuvieran a favor de la independencia, por lo que es racionalmente factible que los extranjeros que votaran, lo hicieran a favor de la "nación catalana" (perdón, acabo de regresar del baño tras vomitar y es que incompatibilidades como nación y Cataluñia me producen estas cosas). Me gustaría saber el futuro próximo en la sociedad de los extranjeros que votaron y los que no, quizás nos llevaríamos sorpresas.
También habría que hacer incapié en la situación geográfica de los pueblos en donde se produjeron las "masivas votaciones", pero eso es otra historia.
Una vez dicho esto mi conclusión: una pena que en una tierra tan rica en tantos aspectos, tan digna de elogios, tan maravillosa por su singular idioma y cultura, tenga entre sus pobladores tanta ameba cerebral.
Un saludo.

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